La impresión 3D avanza paso a paso en el campo de la medicina con aplicaciones sorprendentes, que no podían haberse imaginado hace apenas unos años atrás. Cada día hay nuevas líneas de investigación abiertas en favor de desarrollar e implementar este tipo de tecnología en el ámbito sanitario. En la foto de cabecera podemos ver el producto de la investigación en este campo: un grupo de la Universidad de Victoria (Nueva Zelanda) ha desarrollado un proyecto para generar, con impresoras 3D, férulas que se adapten perfectamente a la zona lesionada del paciente.
En la aplicación práctica actual de la impresión 3D, pueden destacarse tres campos en los que está resultando ser todo un éxito.
COPIAS A ESCALA
Consiste en la reproducción a tamaño exacto de una parte concreta del cuerpo del paciente, la cual requiere de un estudio pormenorizado. En este caso, sirve de ejemplo la reproducción de tumores junto al área afectada, para así practicar con el molde antes de efectuar la operación al paciente, asegurando de esta forma el éxito en la extirpación del tumor.
Un buen ejemplo de esta práctica es Medical Model 3D, que recrea en un diseño en tres dimensiones la parte a tratar, para el uso de los médicos a la hora del diágnostico. Aparte de servir para la diagnosis, es una herramienta muy interesante para preparar el preoperatorio. Y podemos encontrar más usos, ya que a su vez, los modelos pueden utilizarse para el sector docente.
PRÓTESIS
Desde la aparición de las primeras prótesis utilizadas, va a haber un antes y un después con la utilización de la impresión en 3D. No solo permite que los materiales sean más ligeros, sino que además la prótesis se crea con el tamaño y la forma que el paciente necesita exactamente, lográndose de esta forma una mejor adaptación a su uso.
A través de internet surgió la iniciativa E-Nabling the future, que involucra voluntarios por todo el mundo que ayudan al diseño de prótesis manuales para otros niños del globo que probablemente nunca conocerán.
ÓRGANOS
La gran revolución en la medicina traerá la posibilidad de crear órganos adaptados a cada caso concreto y colocarlos por un procedimiento análogo al de las técnicas de implantología.
Se basa en la obtención de células madre o de biopsias, que posteriormente los científicos someten a multiplicación masiva. A partir de ahí, el líquido resultante se aplica con impresión 3D, generando distintos tipos de células que se integran con los tejidos existentes.
Este último caso es el que más camino tiene por recorrer todavía, pero demuestra que las posibilidades de la impresión 3D en el ámbito de la medicina son prácticamente ilimitadas. El avance de la ciencia y la técnica descubrirá un futuro hasta ahora inimaginable.
Si quieres saber más sobre impresión 3D, aquí encontrarás más posts de esta serie:
– Impresoras 3D, ¿el dispositivo estrella de 2015?
– La impresión 3D aplicada al mundo de la construcción y la arquitectura.
– La impresión 3D, un revulsivo para la industria aeroespacial
– Usos de las impresoras 3D en el hogar y en el sector textil
Foto | Jake Evill
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