Son muchas las áreas que se han visto afectadas por los cambios que trae consigo la tecnología e Internet y, por ello, no es descabellado pensar que la Banca puede sufrir una transformación digital dando lugar a un nuevo modelo de gestión y comunicación con el cliente, de tal forma que resulte un servicio más eficiente para ambas partes.
Nuevo modelo
Las TICs dan la posibilidad a las entidades que se dedican a las finanzas ofrecer su tradicional modelo de negocio con un enfoque diferente, para así adaptarse a la demanda de un nuevo tipo de consumidor, al que le caracteriza la exigencia de realizar sus procesos de forma inmediata.
Esto provoca que tanto las empresas, que ofrecen este servicio, como los clientes, que lo disfrutan, se ven beneficiados de la automatización de tareas y , por ello, la mayor rapidez en la gestión y resolución de problemas. Evita la obligación de visitar la sede o sucursal más próxima para realizar tareas simples, permitiendo a los clientes efectuar sus transacciones y consultas vía online.
Beneficios
Este modelo da ventajas a las empresas, en especial a la pequeña y mediana empresa pues en pocos minutos puede ofrecerles respuestas a los problemas que les surjan. De este modo hay compañías fintech que valoran el flujo de efectivo y los datos de negocio a la hora de prestar dinero y no sólo el historial crediticio de la empresa. Haciendo posible, de esta forma, que el cliente en cuestión pueda disponer del dinero en su cuenta bancaria en cuestión de pocas horas, habiendo realizado todos los trámites online.
Así pues el nuevo modelo ofrece ventajas para empresas y clientes, destacando que no deja de ser un “cambio forzado” para así adaptarse rápidamente a las nuevas exigencias del mercado y evitar perder clientes en pro de la competencia.
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