A principios de octubre, la actualidad tecnológica vivió momentos muy agitados con la adquisición del archiconocido Whatsapp por parte de Facebook por la monstruosa cifra de 22.000 millones de dólares. La compañía de Mark Zuckerberg ejecutó un nuevo movimiento -como ya hizo, por ejemplo, con Instagram- para dominar el escenario tecnológico. Pero, ¿cómo puede ser tan elevado el valor de venta de una aplicación de mensajería instantánea? El último barómetro del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) reveló que un 96% de los propietarios de smartphones españoles las utilizan para comunicarse de forma diaria.
Vida conectada
En un post anterior hablamos de la creciente obsesión por tener siempre cerca el smartphone y la fobia a estar sin móvil, conocida como ‘nomofobia’ (no mobile phone phobia). Las nuevas tecnologías han conseguido que estemos conectados durante todo el día, lo que nos ha creado una imparable y creciente necesidad de estar siempre tecleando en nuestro móvil. De hecho, un estudio reciente revela algunos hábitos de consumo tan curiosos como que el 38% de los usuarios se conectan al despertarse, cuando ni siquiera aún han puesto un pie fuera de la cama.
El barómetro del CIS afirma que el 70% de los usuarios españoles de WhatsApp lo hacen sin un objetivo específico la mayor parte del tiempo, lo que se puede atribuir a, por ejemplo, pasar las horas “muertas”, como cuando vamos en transporte público o simplemente estamos aburridos en nuestra casa o esperando a un amigo en una cafetería.
Estos datos son muy positivos desde el punto de vista empresarial, pero para expertos en otras disciplinas, como pueden ser psicólogos o sociólogos, también son, en cierto modo, muy preocupantes, ya que no es la primera vez que alertan de que un uso excesivo de los dispositivos móviles puede provocar el aislamiento en el entorno social y en las actividades lúdicas, lo que a largo plazo puede implicar problemas más serios y de difícil solución en una sociedad hiperconectada.
La televisión sigue siendo la reina
Un estudio de la compañía de investigación de mercado y opinión TNS sobre hábitos de consumo mantiene a la televisión como la reina del salón. Sin embargo, los datos del estudio Connected Life indican que ver la televisión hace tiempo que dejó de ser una actividad única para simultanearla con otras actividades digitales muy distintas: leer emails, comprar online, conectarse a redes sociales o utilizar mensajería instantánea.
Partimos del hecho de que el 75% de los internautas ve la televisión a diario. El concepto multipantalla ha revolucionado la manera de consumir contenidos, ya que ahora no nos resulta suficiente con un solo canal de información. A nivel mundial, los individuos poseen de media cuatro dispositivos, así que, por ejemplo, mientras vemos nuestra serie favorita en la tele -puede que a través de internet en nuestro sobremesa o portátil- queramos comentarlo con nuestros amigos en Whatsapp o emitir nuestra valoración en Twitter. La televisión sigue formando parte de nuestra vida mientras que la popularidad de los contenidos de vídeo online sigue creciendo.
Los españoles dedicamos de media al día más de nueve horas de consumo a través de nuestros medios y dispositivos. Del total de esas nueves horas, el 63% se realiza a través del ordenador, móvil o tableta y un 37 % a través de medios tradicionales, como televisión, radio o medios impresos.
{Foto: Taco Ekkel}
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