¿Están las PYMES preparadas para abordar la Transformación Digital?

Gracias a su tamaño y agilidad en la toma de decisiones, los expertos afirman que las pymes están más preparadas que las grandes empresas para la transformación digital. Y es que, pese a la tendencia tradicional de que las pequeñas y medianas empresas siempre iban por detrás en la adaptación de las nuevas tecnologías, el big data ha supuesto la popularización de esos avances. Las pymes están, hoy en día, más preparadas para superar los retos digitales que se les están imponiendo.

Mediante la conectividad total y a la movilidad, las empresas podrán conocer la experiencia de sus clientes casi a tiempo real. Esto les permitirá redefinir sus estrategias en todo momento, y aumentar de esta manera la productividad y la competitividad.

En esta carrera se hallan inmersas las corporaciones, tanto las más grandes como las pymes. Desde hace unos años, personas y empresas están cambiando la percepción del mundo, así como la forma de relacionarse, tanto en la vida personal como en la laboral.

Todas las empresas han comenzado a definir sus estrategias dentro de este cambio. Están buscando los mecanismos de digitalización que han de incorporar a ellas para poder optimizar los procesos. Se supone así, que se harán más productivas y adquirirán ventajas competitivas frente a otras empresas del mismo área de actuación.

Los retos de la Transformación Digital para las empresas

Uno de los grandes avances que las pymes verán en esta nueva forma de entender los negocios es la conexión con los clientes. Un apartado antes reservado para las grandes empresas, pero que gracias a los medios actuales, las pymes adoptan para sí. De esta manera, podrán saber en todo momento qué es lo que quieren sus clientes, cuándo lo quieren y por qué canales comunicarse con ellos.

Otro reto que deben afrontar las pequeñas empresas en este ámbito es el de la movilidad: los clientes ya no están solo en la tienda o en el ordenador de su casa, y hay que saber llegar a ellos a través de los dispositivos móviles; también se ha de ser flexible en cuanto a localización geográfica.

Todo ello centrado en el cliente, que es quién dirige los pasos a seguir. Por ello, toda empresa deberá buscar nuevos mercados, productos y servicios. Éstos deberán estar basados en los actuales aunque buscando las nuevas necesidades de los clientes. Clientes que están cambiando y no son meros espectadores de la evolución de las empresas.

Abordar la transformación digital es una asignatura que ya están preparando todas las empresas, aunque las pymes tienen, en teoría, el camino más abierto para el cambio. La reestructuración y modificaciones en servicios y prestaciones, se presentan más sencillas para las pequeñas y medianas empresas. Pero solo las que se adapten podrán resistir frente a la nueva competencia.