2022 será el año de la recuperación económica gracias a las acciones que ya se han previsto y a los nuevos planes enfocados en esa dirección. Una parte de la financiación necesaria para ello vendrá de los fondos europeos Next Generation EU destinados a la digitalización de las administraciones públicas.
A España le corresponden unos 2600 millones de euros para invertirlos entre 2021-2024. El reparto se hará para el Plan de Competencias Digitales, proyectos de España Digital y la estrategia nacional de inteligencia artificial. Para 2022 también hay previstas inversiones para adaptar la administración al ciudadano y para infraestructuras digitales.
En esta transformación también juega un papel fundamental el cloud público que en los últimos años ha demostrado que tiene rapidez de despliegue, buena accesibilidad y gran flexibilidad para adaptarse a situaciones cambiantes como las provocadas por la pandemia.
Según el informe Retos y prioridades del Sector Público en España ante la llegada de los fondos Next Generation EU de IDC, el 53% de los organismos encuestados tiene ya o planea desplegar en los próximos meses un modelo híbrido que combine las ventajas del on-premise con las de la nube. Es un reto para las instituciones, pero resulta una inversión ágil, segura y clave para el proceso de transformación de las infraestructuras.
El mismo informe apunta el porcentaje de gasto del presupuesto de TI por categoría de inversión y deja en último lugar, con un 10%, al cloud. Aun así, las estimaciones indican que el mercado de la nube pública crecerá de aquí a 2024, siendo la categoría de aplicaciones la que lo hará en mayor medida. Es interesante apuntar que las soluciones que menos se prevén desplegar son AR-VR y IA-ML, aunque esto puede cambiar al distribuir los fondos previstos.
La mayor preocupación de los encuestados en la seguridad y el segundo el presupuesto, lo que puede solucionarse aprovechando la inversión europea porque la puesta en marcha en más económica de lo que suele pensarse y más segura. De hecho, con sistemas como Cloud Adoption de T-Systems las instituciones se aseguran la protección de la información de ciberamenazas externas que pondrían en peligro la privacidad de los datos.
Además, los fondos Next Generation EU permitirían a las administraciones públicas la digitalización que las convertiría en smart cities. Así podrían utilizar la tecnología para aprovechar mejor los recursos, agilizar las gestiones para ser más rápidas o asegurar que la información está siempre actualizada para evitar errores y ser más eficientes y sostenibles.
Todas estas oportunidades tienen el mismo fin: proporcionar una atención de calidad a la ciudadanía. Así es posible mejorar la imagen que tienen de las instituciones, fortalecer la relación con la población y ganarse la confianza de nuevos inversores para la ciudad.
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