Conectar todos los objetos convencionales —un coche, un par de zapatillas, el termostato de la calefacción o las llaves de casa— entre sí y a Internet es la idea tras el término «Internet de las cosas». De este modo en teoría básicamente cualquier objeto inteligente se podrá identificar y se podrá gestionar, por máquinas o por personas. También los objetos inteligentes que forman el «Internet de las cosas» pueden comunicarse entre ellas: un coche que detecta que está llegando a casa puede avisar a la vivienda para que encienda las luces y la calefacción. La cartera y el móvil pueden saber si uno de los dos se queda atrás, olvidado. La cafetera puede encenderse automáticamente cuando se apaga el despertador.
En 2011 Hans Vestberg, CEO de Ericsson, anticipó que en diez años, para 2021, dos tercios de todos los equipos electrónicos y dispositivos estarían conectados, sumando 50.000 millones de ellos. En un negocio que moverá, según la consultora Gartner, 1.300 billones de euros de en todo el mundo y que afectará a buena parte de los sectores, desde la salud, la industria automovilística o la educación a la domótica y al ocio.
Ante semejante planteamiento surge un problema evidente: para que todos los objetos puedan comunicarse entre sí todos ellos deben de hablar el mismo idioma; o al menos idiomas compatibles.
Para resolver esta cuestión numerosas marcas tecnológicas han formado el consorcio AllSeen Alliance. El objetivo es el mismo que en su día persiguió y logró la Wi-Fi Alliance: que todos los dispositivos, wifi en este caso, fueran capaces de conectarse entre sí independientemente de cuál fuera su fabricante, aplicación, utilidad o función.
Para normalizar el Internet de las cosas la AllSeen Alliance se ha formado para trabajar en el desarrollo del lenguaje AllJoyn. AllJoyn es un proyecto de código abierto, inicialmente desarrollado por Qualcomm, que permitirá que los objetos cotidianos compatibles puedan reconocerse y comunicares entre sí y a la vez conectarse con otras redes, dispositivos y ordenadores. La idea es que AllJoyn actúe como intérprete o traductor de los diversos sistemas operativos y de las plataformas distintas que se anticipa se desarrollarán en los próximos años para hacer posible los objetos inteligentes.
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