
Con la computación en nube caminando a paso firme algunas organizaciones empiezan a interesarse en detalles importantes relativos a cómo funcionan estas instalaciones en las que miles de servidores son virtualizados y adaptados a los requerimientos de empresas y particulares, industrias completas y sistemas Big Data, entre otros.
Greenpeace, por ejemplo publicó su informe de 2014 dedicado a los aspectos ecológicos y de sostenibilidad de las principales empresas del sector. Titulado Clicking Clean (2014) hace un repaso a las «nubes» de 19 compañías y la forma en que gestionan diversos indicadores: de qué fuente obtienen la energía para hacer funcionar sus servidores, cuán transparente es la información que proporcionan al respecto, cómo resuelven las cuestiones de eficiencia y cuál es su política oficial al respecto y su grado de implicación en el desarrollo futuro.
La información incluida en el estudio de Greenpeace es muy detallada, y de él pueden extraerse algunos datos clave bastante interesantes, muchos de ellos relacionados directamente con los servicios en nube y los centros de datos donde se albergan:
* Son ya bastantes los «gigantes» de Internet que se han comprometido a utilizar energías cien por cien renovables, entre ellos Apple, Facebook, Google, Rackspace, Salesforce y Box. Muchos de ellos además han mejorado la información que facilitan al respecto. En cambio se critica a otros como Amazon o Twitter por su falta de transparencia y por estar entre los que más «energías sucias» utilizan – una crítica al modelo «conseguir la electricidad más barata sea cual sea su origen».
* Google, que es una de las empresas con más servidores en Internet sigue siendo la más preocupada por expandirse creando sus propios centros de datos pero también invirtiendo en energías renovables, tanto en su desarrollo como comprándola a los proveedores cuando está disponible.
* Facebook también ha hecho importantes gestos como situar un centro de datos en Iowa, para lo cual realizó en paralelo la mayor compra de aerogeneradores de la historia, que se «plantarán» cerca de esas instalaciones.
* Apple, que no puntuó muy bien en los informes de años anteriores, ha sido la que más puestos ha remontado incluso innovando en algunos aspectos de forma agresiva para convertirse en una empresa que utilice cien por cien energía renovable.
El siguiente reto para la nube tiene un nombre: China. El consumo eléctrico actual de toda China es ya superior al de los Estados Unidos; su «nube global» de internet es tan grande que consume más que países del tamaño de Brasil, Canadá o Alemania. Se ha calculado que entre el 1,5 y el 3 por ciento de toda la electricidad generada en China (unos 1.000 teravatios) se dedica a Internet y compañías gigantescas como Alibaba, Baidu, Tencent y Sina cuentan con más de 600 millones de usuarios, que probablemente serán 800 para 2015. Esas nubes sí que tendrán que ser más verdes por el bien tanto de los habitantes del país como del planeta en general.
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