La fábrica moderna es muy diferente a la de la generación anterior. Hoy, en las factorías podemos encontrar centenares de sensores que recogen información de todo tipo, sectores enteros que se encuentran automatizados y una gestión cada vez más basada en datos.

La digitalización ha entrado con fuerza en las cadenas de montaje, y también es el caso de la inteligencia artificial. Es una tendencia imparable que sirve para relacionar los datos recopilados por los sensores con las acciones a realizar en la cadena de montaje, y que influye de manera directa en la toma de decisiones.

El machine learning tiene cada vez más peso, y los algoritmos desarrollados permiten a los fabricantes alcanzar todo el potencial de las líneas de montaje, totalmente automatizadas o no.

Así puede mejorar la inteligencia artificial la línea de montaje

Uno de los mayores puntos fuertes de la IA es encontrar relaciones entre diferentes conjuntos de datos que los humanos pueden pasar por alto. Por eso se utilizan programas de aprendizaje automático para procesar el Big Datagenerado, y también es la razón por la que la IA es particularmente útil para las líneas de montaje para potenciar la eficiencia.

De esta manera, con la cantidad suficiente de datos, la IA los puede analizar para encontrar esas ineficiencias, y posteriormente aplicar análisis predictivo para sugerir posibles cambios o, incluso, implementarlos automáticamente.

Otra aplicación importante de la IA es la de implementar mantenimiento predictivo. Automatizar la línea de montaje conlleva el riesgo de alguna máquina funcione mal, o que sufra una avería inesperada que puede ser problemática. La IA puede analizar el rendimiento de las máquinas y advertir a los trabajadores si necesitan mantenimiento inmediato, es decir, pueden ayudar a los fabricantes a resolver problemas que de otra manera no se verían.

Y, en el caso de que el resto de la línea de montaje no esté automatizada, la IA aún puede aportar grandes beneficios a la cadena de montaje. Una de sus aplicaciones más prometedoras es el control de calidad, que puede gestionar a través de la visión artificial. Los sistemas de IA al final de una línea de ensamblaje pueden encontrar defectos más rápido y con mayor precisión que las personas.

Las máquinas no se cansan, ni se aburren, por tanto, un verificador de IA daría un análisis preciso y consistente sin importar el tiempo que haya estado funcionando.

Estas son algunas de las aplicaciones más interesantes de la IA en la cadena de montaje. Es seguro que, en el futuro a corto plazo, cada vez más fábricas incluirán estos sistemas inteligentes para mejorar su productividad y aumentar su competitividad.