Con el nuevo año, toca sacar la bola de cristal para avanzar las tendencias más importantes en redes. En 2020 veremos cómo SD-WAN, Wi-Fi 6 y las redes virtuales son protagonistas.
Estas tendencias giran en torno a la realidad de la forma cambiante de las redes en general, es decir, de la ampliación de las operaciones del centro de datos hacia la nube, y las implicaciones de ese cambio en las empresas.
Los cambios en redes de los últimos años son evidentes, ahora que nos podemos detener a observar. Hemos pasado, en el plano de los negocios, de los centros de datos en las instalaciones de las empresas, a la Nube; en cuanto a los usuarios, han pasado de los ordenadores conectados por cables, a los dispositivos conectados sin cables.
Este 2020 promete mucha innovación, y también el despliegue de nuevas tecnologías de conexión que generarán nuevas posibilidades.
La era de la wifi: Wi-Fi 6 y redes 5G
Si simplificamos mucho, ambas formas de comunicación son, en su esencia más básica, wifi. Podemos decir que las señales que están en juego en ambos casos son muy similares, si bien son aplicaciones diferentes. Las redes 5G en 2020 serán, principalmente, para uso doméstico (por consumidores finales).
La Wi-Fi 6 entrará de lleno en el mundo empresarial. El valor que aporta Wi-Fi 6 es su mayor eficiencia y la capacidad de mantener conexiones en condiciones de red muy congestionadas.
Si bien el servicio 5G se lanzará en 2020, es muy improbable que se ofrezca la ultra alta velocidad que la tecnología permite en teoría. De esta forma, veremos una gran cantidad de tráfico inalámbrico de alta velocidad que será «responsabilidad» de las redes Wi-Fi.
SD-WAN, las redes definidas por software
SD-WAN es un enfoque definido por software de la gestión de la red de área amplia o WAN. Tiene algunas ventajas interesantes, como la reducción de los costes con independencia del transporte; la mejora del rendimiento de las aplicaciones empresariales; la optimización de la experiencia de usuario y la eficiencia; y la simplificación de las operaciones con automatización y gestión basada en la nube.
El lugar de trabajo ya no es físico, sino que se está volviendo virtual. Los empleados están cada vez más dispersos, y se están conectando a cada vez más servicios en la nube. Esta dispersión de la conectividad es la que llevará a muchas empresas a reestructurar sus redes en favor de la tecnología SD-WAN.
Las redes como sensores inteligentes
Las funciones de las redes en las empresas empiezan a ser algo más que enviar y recibir datos: ahora se empiezan a utilizar para «sentir» sus entornos. A través de software capaz de perfilar y clasificar los dispositivos, los puntos finales y las aplicaciones, la red podrá colocar los dispositivos en redes virtuales automáticamente.
A partir de ahí, podrá habilitar el conjunto de reglas correcto para proteger esos dispositivos, e identificar problemas de seguridad con anticipación. El siguiente paso lógico será que los sistemas solucionen los problemas por su cuenta.
Los equipos de redes inalámbricas también pueden recopilar datos sobre cómo las personas y las cosas se mueven y usan espacios físicos, por ejemplo, dispositivos IoT en una empresa, ayudando a optimizar los espacios físicos, a mejorar la productividad o incluso para mejorar las ventas.
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