No hay nada más placentero que una buena taza de café. Es algo en lo que, se podría decir, la mayoría de las personas están de acuerdo. El café es lo que las despierta cada mañana, en lo que se refugian a lo largo del día y lo que funciona como fuel en sus relaciones sociales. «Quedar para tomar un café» es como se conecta con amigos, conocidos y hasta compañeros de trabajo.
Pero, además, esa taza de café con la que se ha empezado el día o que ha servido para tener esa buena charla con esa persona de confianza puede ser también un ejemplo perfecto de cómo deben hacerse las cosas para lograr una cadena de suministro y producción mucho más respetuosa con el medio ambiente. El café puede enseñar mucho sobre sostenibilidad y sobre cómo la tecnología es la palanca para lograrla.
La sostenibilidad es ya una de las grandes preocupaciones de las empresas. Por un lado, las recomendaciones de Naciones Unidas —ahí están los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y su agenda para 2030 sobre cómo deberían ser mejor las cosas— y los intereses de los consumidores —que cada vez más reclaman a las marcas cuyos productos consumen un compromiso real con el entorno— han cambiado el marco en el que deben operar. Por otro, los cambios normativos —la Unión Europea ha ido poniendo en marcha y planea seguir haciéndolo leyes que obligan a ajustar la producción y el consumo— empujan a las empresas a tomar decisiones y actuar.
Además, las experiencias de los últimos años han demostrado que la sostenibilidad es necesaria y que los efectos de no cambiar el estado del mundo resultan difícilmente asumibles. Este último verano —con sus episodios de sequía en toda Europa y sus temperaturas extremas de duro impacto para la salud pública— fue un ejemplo claro. Sin embargo, y como recuerdan los expertos de T-Systems, la tecnología ayuda a cambiar las cosas y convertir la producción en mucho más sostenible y respetuosa. Esa taza de café de la que hablábamos será la guía que ayude a comprenderlo.
La sostenibilidad en una taza de café
La Connected Greenhouse 2.0 Coffee no es una plantación de café real, pero sí una simulada que permite comprender todo el alcance de la tecnología en cuestiones de sostenibilidad. Ha sido diseñada por los especialistas de T-Systems empleando herramientas de digitalización de SAP —las mismas que la compañía ofrece a sus clientes y que, por tanto, cualquier empresa puede usar para transformar su negocio—para demostrar cómo, en un par de pasos, todo se vuelve más respetuoso con el entorno, desde la planta a la taza de café que llega a la mesa.
Para empezar, el viaje a la sostenibilidad arranca incluso antes de que se planten las semillas. Empleando la nube y las plataformas de datos, se analiza todo el caudal de información para comprender qué impacto tendrá todo el proceso de comercialización y cómo se puede cambiar para hacerlo mejor. Las herramientas de SAP permiten analizar patrones de datos vinculados al clima o entender las emisiones de carbono que genera la actividad, tomando así mejores decisiones. Así, el cultivo del café de esta taza es ya, de partida, más responsable.
Para continuar, usar herramientas IoT durante el cultivo y la cosecha asegura que siempre se trabajará en condiciones óptimas. Crear gemelos digitales, por ejemplo, adelanta qué puede pasar y ayuda a corregir curso, pero también a entender cómo se está gastando el agua y reducir el despilfarro de este recurso.
Y, para finalizar, la tecnología mejora la cadena de suministro. El control del impacto medioambiental no termina cuando se recolecta el café y se envasan los granos. La tecnología SCM (supply chain management, gestión de la cadena de suministro) ayuda con la trazabilidad de todo el proceso, manteniendo no solo la transparencia de qué se hace y cómo sino también entendiendo en qué se falla y dando la llave de qué se debe mejorar.
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