La transformación digital en las empresas implica una serie de cambios internos que son, a veces, muy radicales. Pongamos por caso la transformación que ha de sufrir una explotación agrícola para entrar de lleno en el mundo conectado y digital.
La modernización de datos es la base de la transformación digital. Las empresas, antes de emprender este camino, disponen de sus propias bases de datos y de sus datos estructurados, pero al modernizarse e introducir, por ejemplo, dispositivos IoT o tecnologías como el reconocimiento de voz, dichos sistemas ya no sirven.
La modernización de los datos se refiere a la acción de trasladar bases de datos «legacy» (es decir, las que ya existen en las empresas) a bases de datos modernas capaces de almacenar datos no estructurados (audios de voz, interacciones en los perfiles sociales, documentos, etcétera).
Las bases de datos tradicionales no pueden satisfacer las demandas que suponen los datos procedentes de dispositivos móviles, del Cloud Computing, el Big Data y otras tantas fuentes dispares.
La capacidad de una empresa para competir en la era digital se basa en su agilidad, y las tecnologías comentadas en el párrafo anterior requiere, además, agilidad para poder ser aplicadas.
El análisis de Big Data, por ejemplo, permite a las empresas tomar decisiones comerciales críticas en tiempo real. Las empresas necesitan un acceso más rápido a los datos y bases de datos altamente escalables, flexibles y de bajo mantenimiento.
Las bases de datos heredadas carecen de esas características y, en el mejor de los casos, se pueden realizar cambios muy complejos y costosos en esas bases de datos para estar a la altura. Pero los riesgos asociados son enormes, partiendo, además, de la base de que simplemente se requiere mucho tiempo y esfuerzo para llevarlos a cabo, algo que afecta la agilidad y retrasa el tiempo de comercialización.
Port otro lado, los costes de mantenimiento y actualización de las bases de datos legacy, la falta de profesionales IT cualificados para mantenerlas y la falta de soporte para dichas bases de datos inclinan la balanza claramente hacia la modernización de datos.
En cuanto a los datos en sí, los modelos de datos establecidos han quedado obsoletos y no admiten web, dispositivos móviles o Big Data. La modernización de datos y el uso de nuevas bases de datos son claves imprescindibles en la transformación digital empresarial.
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