La aparición de Internet y las nuevas tecnologías ha impulsado nuevas formas de comportamiento entre los usuarios y las empresas, lo que ha generado un aumento de la información. Todos esos datos son proporcionados por las redes sociales y subidos a la red mediante el soporte de los smartphones. Esta combinación ha propiciado un crecimiento de la información y una mayor interacción entre el consumidor y vendedor, lo que supone un cambio de modelo en las estrategias de las empresas. Estos datos masivos, también llamados Big Data, no se manejan con bases de datos tradicionales. Hacen falta, para ello el uso de ordenadores potentes y la inversión en herramientas analíticas útiles para el negocio.
Invertir en información es clave. La tecnología evoluciona tan rápidamente que en apenas unos meses cambia todo. Por ejemplo, la llegada del Internet de las Cosas (loT, en inglés) provocará muchos cambios, al poder comunicar todo entre sí. Esta nueva realidad obligará a las empresas a invertir obligatoriamente en Big Data, ya que, según los expertos, las mayor creación de productos y servicios en los próximos años se llevará a cabo en el ámbito de los sistemas de información. Será posible saber qué días se vende más y qué sectores son los más demandados.
Si un negocio invierte o desarrolla herramientas para aprovechar esa información, se reducen los tiempos y, por tanto, los costes. Otro ejemplo: tener todos los tiempos de los procesos y controlar y gestionar el stock aumentará la competitividad. El Big Data también es una herramienta clave para las pymes, pues mantener un contacto directo con el cliente mediante los smartphones ha democratizado las compras. Hoy todo se hace con el móvil: se compra, se paga, se busca información… Una empresa debe invertir en Big Data.
¿Un privilegio exclusivo de las grandes corporaciones?
Debido a los ahorros y beneficios que conlleva el concepto de “pago por uso” en la nube de T-Systems, también tiene sentido implementar un proyecto piloto de SAP HANA en pequeñas y medianas empresas. Sus datos se almacenan en centros de datos austriacos o alemanes que están sujetos a las leyes nacionales de protección y privacidad de datos.
Algunos de los sectores que están obteniendo beneficios por la implantación del big data son diversos:
redes sociales
deportes
wearables
sanidad
seguridad
ocio y entretenimiento
sector agroalimentario
juegos de azar
medioambiente
seguros
banca, etc…
Hechos que demuestran que el Big Data ya es vital en la toma de decisiones de las grandes compañías modernas.
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