Tanto si teletrabajas de manera habitual como si eres uno de los muchos nuevos trabajadores en remoto debido a la pandemia del coronavirus que vivimos y tratamos de frenar entre todos, existen una serie de consejos imprescindibles de ciberseguridad que puedes aprovechar.
En estas páginas hablamos ya de las herramientas principales para poder teletrabajar con garantías, además de las principales técnicas para trabajar en remoto sin perder un ápice de productividad. Hoy, le toca el turno a la ciberseguridad, a aquellas herramientas y consejos que nos pueden hacer la vida más fácil y segura mientras trabajamos desde nuestra casa.
¿Ordenador de la empresa, u ordenador personal?
Lo primero que debemos mencionar es que no es lo mismo trabajar con un equipo proporcionado y mantenido por la empresa, que hacerlo desde nuestro ordenador personal, instalando nuevo software y preparando el entorno para trabajar.
Si nos encontramos en el primer caso, que la empresa facilita los recursos necesarios para el teletrabajo, debemos seguir fielmente las instrucciones que nos proporcionen, y haciendo uso exclusivamente profesional de los dispositivos facilitados. No se debe manipular estos dispositivos ni modificar las configuraciones fijadas por el equipo de TI, ni tampoco prestarlos a otras personas.
En el caso de utilizar nuestros propios dispositivos de uso personal, deberíamos seguir unas pautas mínimas de seguridad, divididas en tres partes: preparación del dispositivo, protección de la información y seguridad en las comunicaciones.
Para la primera parte, la preparación del dispositivo, deberíamos plantearnos:
- Instalar un buen antivirus, que esté actualizado (y que lo haga frecuentemente) y dotado de las mejores herramientas de detección de las amenazas más comunes.
- Actualiza todas las aplicaciones, empezando por el propio sistema operativo: navegadores, clientes de correo… cualquier aplicación que vayas a utilizar en el trabajo.
- Aísla tu ordenador: crea una cuenta de usuario nueva para trabajar, configura una VPN para conectarte a los servidores de la empresa.
Para proteger la información, no podemos olvidarnos de configurar las copias de respaldo de los datos críticos y confidenciales para evitar riesgos. Lo mejor es disponer de copia física y en la Nube, de manera que la probabilidad de pérdida de datos se minimice. Además, el cifrado del disco duro (o parte de él, como una carpeta dedicada al trabajo) es una buena idea.
La conexión que utilices para enviar y recibir los datos debe de ser segura. Si estás en casa y utilizas tu WiFi, asegúrala con una buena contraseña en el router y busca posibles intrusos con estas herramientas; en caso de conectarte en el exterior, evita las WiFi públicas, porque son muy inseguras.
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